El líder del Partido Laborista de Reino Unido, Jeremy Corbyn, desveló ayer que planea presentar una moción de censura contra el Gobierno con el objetivo de sacar a Boris Johnson del cargo y formar un Ejecutivo temporal que lideraría él mismo para aplazar la fecha del 'Brexit'. La propuesta del líder del Partido Laborista, a cambio de quedarse él de forma "temporal" en Downing Street, fue recibida con cautela entre quienes deberían ser sus teóricos apoyos, que en el mejor de los casos se han ofrecido a escucharle.

"Este Gobierno no tiene un mandato para un Brexit sin acuerdo y el referéndum de 2016 no dio mandato alguno para que no hubiera acuerdo", manifestó Corbyn en una carta a otros partidos en el que ha avanzado que presentará la moción de censura "a la primera oportunidad en la que haya visos de éxito".

Corbyn detalló que, una vez la moción fuera aprobada, él mismo, como líder opositor, buscaría la confianza de la Cámara de los Comunes para encabezar un "Gobierno temporal estrictamente limitado en el tiempo con el objetivo de convocar elecciones generales y lograr la necesaria extensión del Artículo 50"

"En esas elecciones generales, los laboristas se comprometerían a una votación pública sobre los términos de salida de la Unión Europea, incluida una opción para permanecer (en el bloque)", ha remachado. Un 'Brexit' desordenado, ha apuntado, sería "profundamente dañino".

El primer ministro, Boris Johnson, abogó en reiteradas ocasiones con cumplir la fecha fijada para la salida de Reino Unido de la UE, con o sin acuerdo de por medio. "Vamos a restaurar la confianza en nuestra democracia y salir de la UE el 31 de octubre", ha dicho este jueves en Twitter, ya con la propuesta de Corbyn en portada de todos los medios.

"Este gobierno cree que es la gente quien manda y que se deben respetar las votaciones, (pero) Jeremy Corbyn cree que la gente está para obedecer y que los políticos pueden anular las votaciones que no les gustan", argumentó un portavoz de Johnson.