El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha asegurado este viernes en una entrevista para la cadena de televisión estadounidense NBC News que no quiere una guerra con Irán, pero ha afirmado que si la hay habrá una "destrucción como nunca antes se ha visto".

"No estoy buscando la guerra, y si la hay, será una destrucción como nunca antes se ha visto. Pero no estoy buscando hacer eso", ha detallado en la entrevista, un día después de que estuviera dispuesto a atacar a Irán, en represalia por el derribo de un dron, pero decidió dar marcha atrás en el último minuto.

"Las cosas hubieran ocurrido en un punto en el que no se podía dar marcha atrás", ha recalcado Trump, quien ha asegurado que el plan estaba "listo para comenzar, sujeto a mi aprobación".

El mandatario estadounidense ha señalado que los generales le informaron de que alrededor de 150 personas habrían muerto si no hubiera frenado el ataque en el último momento.

"Lo pensé por un segundo y dije: '¿Sabes qué? Ellos derribaron un dron (...) y aquí estamos sentados con 150 personas que probablemente habrían muerto alrededor de medio hora después de mi aprobación", ha detallado Trump. "Y no me gustó, no pensé que fuera proporcional", ha añadido.

El diario 'The New York Times' ha señalado que el secretario de Estado, Mike Pompeo, el asesor de Seguridad Nacional, John Bolton, y la directora de la CIA, Gina Hasel, eran partidarios de una acción militar contra Irán por el derribo del dron.

Según la versión de Teherán, que este viernes ha mostrado a la opinión pública restos del aparato derribado, el dron se encontraba dentro de su espacio aéreo en la provincia de Hormozgán.

Sin embargo, el Mando Central del Ejército estadounidense aseguró que "las informaciones iraníes sobre que la aeronave estaba en Irán son falsas". "Es un ataque no provocado contra un activo de la vigilancia aérea de Estados Unidos en el espacio aéreo internacional", dijo en un comunicado.

Así las cosas, Teherán ha dejado claro este viernes que, aunque no quiere una confrontación con Estados Unidos, no dudará si tiene que responder ante ello. "Hay pruebas irrefutables sobre la presencia de este dron en el espacio aéreo iraní e incluso algunas partes de su fuselaje han sido recuperadas en aguas territoriales iraníes", le ha trasladado el viceministro de Exteriores iraní, Abbas Araqchi, al embajador suizo, Markus Leitner, en una conversación telefónica.