Unas 2.700 personas secundaron ayer el acto XXVI de los "chalecos amarillos" en toda Francia, según el balance del Ministerio del Interior correspondiente a las 14.00 horas, lo que supone un descenso respecto a los 3.600 participantes de hace siete días.

Una de las movilizaciones de mayor peso fue, de nuevo, la de París, con 600 asistentes, 400 menos que el sábado pasado, aunque también hubo concentraciones en Lyon, Nantes y Montpellier, con importantes números de participantes. Los "chalecos amarillos" rechazaron el cómputo de las autoridades.

En Nantes y Lyon la Policía hubo de emplear gas lacrimógeno contra manifestantes encapuchados que actuaron en las inmediaciones de una manifestación mayoritariamente pacífica.

Los alborotadores lanzaron botellas y rompieron escaparates en Nantes y en Lyon los agentes utilizaron gas lacrimógeno para impedir el acceso a la plaza Bellecour.