La tensión reinaba anoche en Caracas tras una jornada de manifestaciones enfrentadas de opositores y seguidores del chavismo en las que se registraron diversos choques con las fuerzas del orden saldados con un número no precisado de heridos y detenidos. Tras el fracaso de la asonada militar que intentó desencadenar el martes, el autoproclamado presidente Juan Guaidó se dirigió a la multitud congregada en la capital venezolana y le instó a permanecer en las calles día tras día, a la vez que convocó una huelga general contra el chavismo: "No hay vuelta atrás", afirmó.

Por otro lado, el líder opositor Leopoldo López, liberado de su arresto domiciliario el martes por Guaidó al frente de un pequeño grupo de militares, fue acogido ayer en la Embajada española en Caracas, después de que se refugiase primero en la de Chile. La vicepresidenta en funciones del Gobierno español, Carmen Calvo, confirmó la acogida a López y su familia.

Guaidó reconoció que el apoyo militar que obtuvo en el arranque de su "Operación Libertad" fue insuficiente y reiteró su llamamiento a los militares: "Está claro que las Fuerzas Armadas nos escuchan pero ayer (por el martes) no fueron suficientes", dijo.

La Guardia Nacional Bolivariana (GNB) cargó contra algunos manifestantes que secundaban la convocatoria del autoproclamado"presidente encargado" . Miles de personas se manifestaron pacíficamente en la zona oriental de Caracas y en otros rincones de la geografía venezolana. Entretanto, en la zona occidental de la capital, miles de 'chavistas' respondían a la invitación de Nicolás Maduro a congregarse en el palacio presidencial este 1 de mayo como prueba de la unidad nacional tras lo que ha considerado una "escaramuza golpista" que fue derrotada.

"La clase obrera se moviliza en todo el país para celebrar su día y defender sus logros, con una gran marcha que le dirá NO al golpismo y NO a la injerencia yankee. ¡Nervios de acero!, ¡calma y cordura!", escribió el presidente venezolano en Twitter.

El llamamiento de Guaidó a la huelga fue rápidamente replicado por el dirigente chavista Diosdado Cabello, quien puso en duda que la propuesta tenga éxito y consideró que el líder opositor dice "muchas boberías". El presidente Nicolás Maduro dio por "demostrado que la injerencia, el golpismo y el enfrentamiento armado no son el camino" para Venezuela.

Desde Estados Unidos, el secretario de Estado, Mike Pompeo, dejó caer la posibilidad de lanzar una operación militar para derrocar a Maduro. Esta hipótesis fue desmentida de inmediato por el almirante Craig Faller, responsable del Comando Sur de las Fuerzas Armadas de EE UU, operativo en Latinoamérica, quien aseguró que una transición democrática "está de camino". El secretario de Defensa en funciones, Patrick Shanahan, canceló un viaje a Europa que debía comenzar ayer para "coordinar más eficazmente" el seguimiento de la situación en Venezuela.

El vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, se mostró ayer "alentado" por las protestas en Venezuela y prometió que Washington seguirá respaldando al líder opositor Juan Guaidó hasta que haya un relevo de poder.

"Es alentador ver a decenas de miles de personas tomando hoy las calles de Venezuela para defender su libertad y queremos que sepan esto: estamos con ustedes", dijo Pence a un pequeño grupo de medios, entre ellos Efe, durante una visita a Baltimore (Maryland, EE.UU.).