El general Jalifa Hafter, hombre fuerte del Gobierno libio de Bengasi, ordenó ayer el inicio de la operación militar para "liberar Trípoli", capital del otro Gobierno, el apoyado por la ONU. La ofensiva coincide con la visita a la ciudad del secretario general de la ONU, Antonio Guterres, quien insistió en que "no hay solución militar" al conflicto. La visita de Guterres está destinada a impulsar una reunificación del país que ahora mismo parece ilusoria.
