Mustafá Buchachi, uno de los más relevantes líderes de las protestas en Argelia, rechazó ayer la propuesta del jefe del Ejército, general Salah, para inhabilitar al presidente del país, Abdelaziz Buteflika, cuyo mandato vence el 28 de abril, y así desbloquear la crisis política. Buchachi anunció que las movilizaciones seguirán hasta que cambie el régimen político, porque la inhabilitación haría que fueran relevantes personalidades del mismo "quienes supervisasen el periodo de transición y organizasen las elecciones presidenciales".

La propuesta del general Salah ha sido interpretada como un intento del régimen argelino de reemplazar al "clan Buteflika" con otros elementos del sistema antes de que las protestas adquieran el sesgo violento que por el momento no tienen.

Así lo ha denunciado, por ejemplo, el partido opositor Agrupación por la Cultura y la Democracia (RCD), que habla de "intento de golpe de Estado" y descarta que el jefe del Estado Mayor del Ejército "pueda ser parte de la solución". También rechazó la propuesta el mayor partido islamista autorizado, el Movimiento Social por la Paz, tercera fuerza política. Por el contrario, los dos partidos gubernamentales (FLN y RDN) han apoyado la propuesta de inhabilitación, al igual que el principal de los sindicatos argelinos, la UGTA.