El expresidente de Brasil Michel Temer (2016-2019) fue encarcelado ayer por corrupto por el juez de la operación Lava Jato, nombre de la mayor intervención judicial de combate de la corrupción en la historia de Brasil.

Temer sucedió en 2016 a Dilma Rousseff (Partido dos Trabalhadores), heredera de Lula da Silva, quien fue separada de la presidencia brasileña en un turbio proceso en el que se le acusaba de maquillar las cuentas estatales para disminuir el impacto del déficit público.

Temer, que calificó su prisión de "barbaridad", fue detenido a la vez que el exministro Wellington Moreira Franco en el marco de una investigación para esclarecer supuestas irregularidades en contratos firmados entre empresas ya condenadas por la "Lava Jato" y Eletronuclear, la compañía estatal que opera las plantas nucleares del país. Se trata del segundo expresidente detenido por delitos vinculados a la "Lava Jato", después de Lula, que cumple desde abril de 2018 dos condenas a 12 años por corrupción.