Cientos de venezolanos comenzaron a organizarse en redes de voluntarios para la distribución de una ayuda humanitaria que sigue acumulándose en las fronteras y que el Gobierno chavista de Nicolás Maduro insiste en rechazar por considerar que se trata de un "show" político.

Tal y como había anunciado el jefe del Parlamento y autoproclamado presidente Juan Guaidó, ayer empezó la organización de personas interesadas en trabajar gratuitamente en la distribución de alimentos y medicinas. El presidente de la comisión parlamentaria de Seguimiento de la Ayuda Humanitaria, Miguel Pizarro, explicó que el primer lote de donaciones que está acopiándose en la ciudad colombiana de Cúcuta, fronteriza con Venezuela, servirá para atender urgencias.

Por otra parte, la compañía estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA) informó a los presidentes de las empresas mixtas del traslado de la cuenta para el abono de las exportaciones de crudo a la entidad rusa Gazprombank para sortear así las sanciones impuestas por el Gobierno de Estados Unidos.

Las represalias de Washington han dejado decenas de barcos cargados de crudo varados fuera de los puertos venezolanos y también están llevando a PDVSA a detener producción y mejoramiento de crudo.