El hombre que mató este miércoles por la tarde a una persona e hirió a otras cinco en un tiroteo, que aparentemente tuvo su origen en un conflicto por un perro, se suicidó por la noche en su domicilio en Bastia, en el norte de la isla francesa de Córcega.
El ministro del Interior, Christophe Castaner, informó poco después de medianoche de que el autor del tiroteo fue encontrado sin vida por las fuerzas del orden, en un mensaje en su cuenta de Twitter.
Durante la madrugada, la fiscal de Bastia, Caroline Tharot, explicó en una comparecencia ante los medios que el hombre se llamaba Joseph Orsoni y que su suicidio se produjo pese a los intentos de negociación de la policía, que rechazó.
Tharot precisó que disparó contra una decena de personas y que uno de los cinco heridos fue uno de los policías que había acudido cuando se dio la alerta.
El suceso se originó por un conflicto del atacante con un vecino a causa de un perro desde hacía años, según la fiscal, que precisó que Orsoni, nacido en 1953, había sido condenado en dos ocasiones -la última en 2012- por violencia con armas.
