La cúpula militar venezolana cerró filas ayer en torno al presidente Nicolás Maduro, al día siguiente de que el opositor Juan Guaidó, presidente de la Asamblea Nacional (AN), se autoproclamase jefe de Estado interino. Las protestas callejeras, que continuaron por tercer día consecutivo, se han cobrado la vida de al menos 26 personas. Maduro, que buscó el respaldo del Poder Judicial, se dijo abierto a iniciar el proceso de diálogo propuesto por México y Uruguay, dos de los pocos países latinoamericanos que no han reconocido a Guaidó. Por su parte Rusia, China y Turquía se alinearon sin fisuras con el régimen chavista.

El respaldo militar a Maduro fue expresado por el ministro de Defensa, Vladimir Padrino, quien advirtió que el Ejército no aceptará a "un presidente autoproclamado" e "impuesto a la sombra de intereses oscuros" ni se "subordinará a una potencia extranjera", en referencia a Estados Unidos, que "persigue instalar un Gobierno paralelo" por un "golpe de Estado". Padrino expresó agradecimiento a los gobiernos extranjeros que promueven el diálogo como salida a la crisis.

Horas antes, generales responsables de diferentes regiones ratificaron su apoyo a Maduro y enfatizaron que "el presidente es escogido solo por el pueblo", en palabras del mayor general Bernal Martínez, de la región de los Andes, transmitidas por el canal estatal VTV, a igual que las de los responsables de Los Llanos y la región Central.

Ante el Tribunal Supremo

Maduro anunció que acepta abrir un diálogo con la oposición: "México y Uruguay han propuesto que se cree una iniciativa internacional para promover un diálogo de las partes, para buscar una negociación, para buscar la paz. Estoy listo", dijo ante el Tribunal Supremo (TS).

El presidente del TS, Maikel Moreno, denunció que "se está gestando un golpe de Estado con la anuencia de gobiernos extranjeros con un vasto antecedente de conspiración y promotores de guerra fraticida en la región", de nuevo en alusión a EE UU, que, junto a Canadá, fue la primera potencia en reconocer a Guaidó, quien anoche llevaba 24 horas sin aparecer en público y cuyo paradero se desconoce. Dos de sus allegados aseguraron que está "a buen resguardo", pero en una ubicación secreta por temor a las acciones que pueda tomar la justicia.

Moreno respaldó a Maduro y afirmó que los jueces deben "jugar un papel preponderante en la defensa de la soberanía e integridad nacional". El presidente de la Sala Constitucional del Supremo exhortó a la Fiscalía a "tomar medidas inmediatas" por la "conducta delictiva" del presidente y la Mesa de la Asamblea Nacional.

Maduro ha recibido escasos apoyos exteriores, pero algunos son de gran peso, como los de Rusia y China. El ministerio de Exteriores ruso acusó a EE UU de buscar "una dualidad de poder" que "lleve directamente al caos". Moscú expresó su temor a "una intervención militar exterior" de consecuencias "catastróficas". China censuró la injerencia de EE UU, instó a la comunidad internacional a hacer esfuerzos para oponerse y alentó el diálogo como salida a la crisis.