Un directivo en Polonia del gigante chino de las telecomunicaciones Huawei ha sido detenido en ese país acusado de espionaje, según informó ayer el Gobierno polaco. El Ejecutivo también informó de la detención de un funcionario polaco de los servicios de seguridad estatales que trabajó en el pasado en la empresa de telefonía Orange y que también está acusado de espionaje.

Se trata de la segunda detención de un alto cargo de la multinacional china en las últimas semanas, después del arresto en Canadá de su directora ejecutiva, Meng Wanzhou, el pasado diciembre a instancias de Estados Unidos.

Las oficinas de Huawei y Orange en Varsovia fueron registradas por miembros de la agencia de contrainteligencia y seguridad nacional en el marco de la investigación, según confirmaron las autoridades locales.

Los dos detenidos, que se han declarado inocentes y se niegan a declarar, se encuentran en prisión preventiva y se arriesgan a penas de hasta diez años de cárcel.

El Gobierno chino se manifestó ayer "muy preocupado" por la detención. Pekín anunció que ha solicitado un "trato justo acorde con la ley y la protección efectiva de las partes".

En los últimos meses, varios países occidentales han mostrado sus reservas respecto a la expansión de Huawei y su sensible participación en la creación de las redes mundiales de telecomunicaciones 5G, unas sospechas que Pekín considera infundadas.