El Gobierno de Italia, de coalición entre la ultraderechista Liga y el antisistema M5S logró ayer in extremis la aprobación del Parlamento a los Presupuestos para 2019 avalados por la Comisión Europea. Los dos partidos gubernamentales se quedaron solos en la aprobación, que ya había sido conseguida en el Senado el pasado día 23.

Las cuentas italianas obtuvieron el aval de la Comisión después de que Roma accediera a rebajar su previsión de déficit para 2019 hasta el 2,04% del Producto Interior Bruto, frente al 2,4% propuesto en un primer momento y rechazado por Bruselas en una decisión sin precedentes, que vino acompañada de la amenaza de sanciones.

El resultado se daba ya por descontado, después de que el Ejecutivo populista superara el sábado una votación de confianza en la Cámara baja, una medida a la que se recurre para acelerar la tramitación de leyes y evitar posibles enmiendas.