El presiente de EE UU, Donald Trump, anunció ayer dos nuevos cambios en su Gobierno con la nominación del veterano exfiscal general William Barr para ese cargo y de la portavoz del Departamento de Estado, Heather Nauert, como nueva embajadora ante la ONU, en sustitución de Nikki Haley, que el jueves se despidió del cargo viendo derrotada ante la Asamblea General su propuesta para condenar a Hamás.
La nueva crisis de Gobierno empezó a gestarse tras las legislativas de medio mandato, cuando el hasta entonces fiscal general, Jeff Sessions, dimitió presionado por Trump. Le sucedió interinamente Matthew Whitaker, su jefe de gabinete, pero sus declaraciones en favor del archivo de la investigación de la trama rusa hacían casi imposible su nombramiento.
Trump dijo ayer que "siempre" abogó por Barr para dirigir la cartera de Justicia. "Era mi primera opción desde el primer día". Barr, de 68 años, ya desempeñó el cargo entre 1991 y 1993, bajo la presidencia de George Bush padre, fallecido el pasado fin de semana.
Mientras, el ex secretario de Estado Rex Tillerson, despedido en marzo, reveló que "muy a menudo" tuvo que advertir a Trump que no podía poner en marcha algunas de sus políticas porque "violaban la ley", informó la cadena televisiva CBS.
