Donald Trump anunció ayer mayores restricciones a la concesión de asilo en la frontera sur ante la llegada de la caravana de miles de centroamericanos que ayer partió de México rumbo a la linde. "La gente puede venir, pero tienen que venir a través de los puertos de entrada (autorizados)", dijo el presidente de Estados Unidos a los informadores antes de partir hacia Francia para tomar parte en los actos de conmemoración del armisticio de la I Guerra Mundial.

Más de 2.000 migrantes de la caravana que llegó a Ciudad de México el pasado domingo emprendieron ayer viaje al norte después de que la ONU se negara a ofrecerles transporte, mientras que el resto de los cerca de 5.000 centroamericanos esperará a hoy para salir.

En la orden firmada ayer por Trump -que está basada en las mismas prerrogativas que le permitieron en 2017 lanzar sus dos vetos migratorios para personas procedentes de países de mayoría musulmana-, el Presidente prohíbe durante al menos 90 días la entrada en EE UU de quienes crucen ilegalmente la frontera sur, lo que implica la puesta en marcha de una nueva regulación del Gobierno que elimina la elegibilidad para obtener asilo a quienes han incumplido una prohibición presidencial.

De esta manera, los migrantes que crucen de forma irregular la frontera no podrían solicitar asilo en el país y solo podrían hacerlo quienes entren por puntos de acceso autorizados, informaron funcionarios de la Administración, según informa "Efe".

Por otra parte, el presidente norteamericano consideró una "desgracia" el retraso acumulado en el escrutinio de los votos en la carrera por el Senado y la Gobernación en Florida, donde la ventaja de los republicanos se está reduciendo, lo que tachó de "fraude" orquestado por la oposición.

El lento recuento en los condados floridanos de Broward y Palm Beach, feudos demócratas con polémicos procesos de escrutinio en el pasado, irritó a Trump, cuyo partido republicano perdió esta semana el mando en la Cámara de Representantes. El magnate puso en entredicho a la supervisora electoral de Broward, Brenda Snipes, de que la dijo que tiene "una historia horrible".

"De repente (los demócratas) están encontrando votos de la nada", añadió. Y tachó al letrado del candidato demócrata Bill Nelson, Marc Elías, de "mejor abogado de robo de elecciones".