El envío por correo de dos paquetes explosivos al exvicepresidente Joe Biden, compañero de fórmula de Obama, y de un tercero al actor Robert de Niro eleva a diez los objetivos de la ola terrorista que desde el lunes se abate sobre Estados Unidos, cuando faltan diez días para las legislativas de medio mandato. Ninguna de las bombas, calificadas por la Policía de caseras, causó daños a sus destinatarios, todos ellos personas denostadas por el presidente Trump.

De Niro, dos veces ganador del premio Oscar, fue ovacionado en junio al aludir con improperios a Trump en la gala de los premios "Tony". En la campaña de 2016, calificó al magnate de "descaradamente estúpido". Junto a Biden y De Niro han recibido bombas el millonario George Soros, el expresidente Obama, el expresidente Clinton y la exsecretaria de Estado Hillary Clinton, el exdirector de la CIA con Obama John Brennan -que la recibió en la sede neoyorquina de la cadena de televisión CNN-, el exfiscal general de Obama Eric Holder y dos legisladoras demócratas.

Trump estimó que los envíos son consecuencia de "la ira que vemos hoy en día en nuestra sociedad", que atribuyó a "las informaciones deliberadamente falsas e inexactas" de los medios. El magnate, propulsor de los conceptos de "hechos alternativos" y "posverdad", instó a los medios a cambiar su "comportamiento", que tachó de "tan malo y odioso que excede cualquier descripción".