Una mujer palestina, Aisha Muhamad Talal Rab, de 48 años y madre de ocho hijos, falleció el viernes por la noche en Cisjordania a consecuencia de las heridas causadas por piedras lanzadas por colonos israelíes contra el coche en el que viajaba con su marido al sur de la ciudad de Nablus, informaron este sábado fuentes de la seguridad y medios palestinos.

Un portavoz de la Policía israelí confirmó en un comunicado que el coche recibió pedradas, sin especificar quién las lanzó, e informó de la apertura de una investigación sobre lo sucedido.

Éste es el último incidente de una semana violenta en Cisjordania: el jueves dos israelíes resultaron heridas en un ataque con arma blanca en la entrada de una base militar en la zona de Nablus y el domingo otros dos israelíes murieron en una fábrica de la zona industrial de Barkán.

Entre tanto, en Gaza, siete palestinos perecieron el viernes por los renovados enfrentamientos entre manifestantes y fuerzas israelíes a lo largo de la frontera con la Franja, según las autoridades palestinas.

Según el Ejército israelí, 15.000 manifestantes se congregaron en diferentes puntos de la frontera, y que lanzaron neumáticos en llamas, piedras, cócteles molotov y granadas a los soldados.