Fue una de las desapariciones más polémicas y sonadas de la historia internacional. Madeleine McCann se esfumó en el año 2007 (por entonces tenía tan solo tres años) durante unas vacaciones en Portugal y no se ha vuelto a saber nada de ella, aunque siempre se ha creído que el secuestro era el principal motivo.

Todo un misterio que ha sido más que investigado tanto por la Policía portuguesa como por Scotland Yard y que toda se mantiene abierto. Aunque ha sido esta semana cuando el máximo exponente de las fuerzas de seguridad londinenses ha lanzado un órdago a la investigación.

David Edgar ha concedido una entrevista al periódico inglés 'The Sun', donde ha dejado muy clara su posición al respecto del caso Madeleine. "Aun está viva y permanece en Portugal", dice sin cortapisas el detective inglés en el famoso tabloide. "Este caso es desconcertante pero solucionable", añade.

Edgar, además, se anima a dar consejos a los investigadores del caso. "Solo conseguirán resolver el caso si los testigos deciden confesar. Ya sea por remordimientos de conciencia o porque se encuentren en el lecho de muerte", dice para aladir que "también puede darse la situación de que el secuestrador discuta con alguno de los testigos y estos se decidan a confesar".

Las afirmaciones de Edgar no son nada nuevo para los padres de la pequeña. Investigados en su momento, siempre han mantenido que seguía viva.

Otras teorías señalaban directamente a los progenitores y hablanban de que Madeleine murió en el apartamento turístico del balneario de Praia da Luz.