La aviación rusa lanzó hoy alrededor de 90 ataques aéreos en la provincia norteña de Idleb, los "más intensos y agresivos" desde hace un mes contra la región, que han dejado al menos cinco civiles muertos, entre ellos cuatro niños, informó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.

Tres menores y una mujer perecieron en las afueras de la población de Abdin, mientras que una niña perdió la vida por los bombardeos en el municipio de Al Halba, en el sur de Idleb, provincia sobre la que se prepara una inminente ofensiva por parte de las fuerzas gubernamentales sirias y sus aliados.

El Observatorio indicó que estos son los ataques "más violentos e intensos" por parte de Rusia, aliada de Damasco, desde el pasado 10 de agosto contra la región de Idleb.

La ONG, cuya sede está en Reino Unido pero que cuenta con una amplia red de colaboradores en el terreno, advirtió que el número de muertos podría aumentar por la gravedad de los heridos, aunque no especificó una cifra.

Asimismo, los bombardeos rusos impactaron también contra las zonas de Jan Shijún, Al Latamna y Tel Aas, en el sur y sureste de Idleb, dijo el Observatorio.

Estas incursiones aéreas fueron acompañadas de ataques de artillería y cohetes lanzados por parte del Gobierno de Damasco, que en los últimos días ha reforzado sus unidades militares en los alrededores de Idleb para lanzar en breve una ofensiva para expulsar a las facciones rebeldes y extremistas.

"Esta mañana se están produciendo intensos bombardeos contra Idleb por parte de aviones y helicópteros rusos y del régimen y están atacando lugares en los que hay civiles", confirmó a Efe el portavoz de la alianza rebelde Frente Nacional para la Liberación, Nayi Abu Huzaifa.

Los bombardeos se producen un día después de que Rusia, Irán y Turquía pidieran a las facciones armadas que depongan sus armas para evitar así una tragedia humanitaria ante la operación militar de las fuerzas leales al presidente sirio, Bachar al Asad.