El presidente estadounidense, Donald Trump, advirtió ayer a su homólogo iraní, Hasan Rohaní, que sus amenazas contra Estados Unidos tendrán unas consecuencias "históricas" si vuelven a repetirse en el futuro.
"Al presidente iraní Rohaní: nunca, nunca jamás vuelva a amenazar a Estados Unidos o sufrirá consecuencias como pocos han sufrido a lo largo de la historia", escribió ayer el magnate en un mensaje repleto de mayúsculas (el equivalente al grito) en su cuenta de la red social Twitter, agregando que el suyo ya no es un país que vaya a aguantar "las demenciales palabras de violencia y muerte" del presidente de la República Islámica.
Trump respondió así a las declaraciones que Rohaní, horas antes, había realizado en una ceremonia con diplomáticos iraníes, instando a Washington a "no jugar con la cola del león" ya que un conflicto armado con Irán sería "la madre de todas las guerras".
"Bravucón mentiroso"
"Negociar hoy con EE UU no significa más que rendición y el fin de los logros de la nación de Irán. Si nos rendimos ante un bravucón mentiroso como Trump, saquean Irán", aseguró el presidente persa, destacando la posición dominante de su país en el Golfo Pérsico y en el Estrecho de Ormuz, principal punto de paso del transporte naval de crudo.
Las tensiones entre ambos países viven un momento de repunte desde que Trump retiró a Estados Unidos del acuerdo nuclear multilateral de 2015 el pasado mayo, firmado por Irán y el Grupo 5+1 (con Rusia, China, Reino Unido, Francia y Alemania) para limitar el programa atómico de Teherán a cambio del levantamiento de las sanciones internacionales. Tras su retirada, Washington anunció un nuevo paquete de sanciones económicas contra la maltrecha economía persa que entrarán en vigor este mes de agosto, lo que disparó de nuevo la tensión con Teherán.
Así, el ministro iraní de Defensa, Amir Hatamí, respaldó el tono amenazante del presidente persa asegurando que EE UU y sus aliados regionales "solo entienden el lenguaje de la fuerza".
