El Gobierno de Estados Unidos negó ayer que el presidente, Donald Trump, planeara el año pasado una invasión militar de Venezuela, tal y como desvelaron unos informes de prensa difundidos este miércoles.

"No se planeó una invasión", declaró un portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, el órgano encargado de centralizar la política exterior, militar y de inteligencia de Washington.

El funcionario, que pidió el anonimato, subrayó no obstante que EE UU sigue considerando "todas las opciones", incluida la acción militar, para ayudar al pueblo venezolano a recuperar "la democracia, la estabilidad y la prosperidad", resaltando a pesar de ello que la castrense fue sólo una de las muchas vías que pasaron por la mesa del Presidente.

Por su parte, Trump elogió ayer desde su cuenta personal de Twitter la labor de los agentes fronterizos e instó al Congreso a reformar rápidamente las "absurdas" leyes migratorias de EE UU.

"Digámosle a la gente '¡Fuera!' y que se vayan, tal como harían si estuvieran en vuestro jardín", escribió el magnate para ejemplificar su propuesta de un sistema que permita la expulsión de los inmigrantes irregulares sin tener que hacer frente "a un costoso juicio", tal y como exige la legislación actual.