El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, confirmó ayer que fue informado del ataque lanzado de madrugada en Siria por EE UU, Reino Unido y Francia y de su alcance "limitado". Una intervención que Rajoy, además, consideró "legítima y proporcionada" a los "brutales ataques" que está sufriendo la población civil por parte del régimen.

"Les recuerdo que el ataque con armas químicas es un crimen contra la humanidad", dijo el jefe del Ejecutivo español en una breve declaración en Zamora, agregando que él y su Gobierno, "evidentemente", siempre prefieren "una acción concertada internacional", no obstante lo cual "los ataques contra la población indefensa, contra mujeres y niños, no pueden quedar sin respuesta".

Como el resto de los líderes de las principales potencias aliadas, Rajoy aseguró que el objetivo de la intervención es "reducir la capacidad del régimen para perpetrar nuevos ataques contra su población". Lo que no le impidió subrayar que "solo un proceso político de transición liderado por Naciones Unidas puede traer la paz a Siria y poner fin a tanto sufrimiento".

Muy distinta fue la reacción de los partidos de la izquierda. El más ponderado en sus críticas fue el PSOE; los más virulentos, Podemos e Izquierda Unida (IU).

El líder socialista, Pedro Sánchez, reclamó el "cese de los bombardeos" en Siria y una acción "política y dialogada que resuelva la crisis". Sánchez condenó la dictadura de Al Asad, pero recalcó que "la comunidad internacional tiene que actuar en base a la legalidad y las resoluciones de Naciones Unidas".

El PSOE emitió un comunicado en el que advierte que la guerra en Siria no terminará con más bombas, sino "con más diálogo y con un esfuerzo concertado en la mesa de negociación", si bien considera que el uso de armas químicas por el régimen de Damasco es "inaceptable y exige una respuesta".

Podemos e IU lanzaron sus críticas desde las redes sociales. Para Pablo Iglesias, la intervención de EE UU, Francia y el Reino Unido "desprecia la legalidad internacional" y "se produce justo cuando los inspectores internacionales iban a investigar el uso de armas químicas". Y se preguntó: "¿Qué opina nuestro Gobierno? ¿Y Cs? ¿Nos van a contar que Trump busca la paz? No a la guerra".

IU condena un ataque lanzado "al margen de la legalidad internacional" que solo sirve para "desestabilizar" más la región y alimentar la "amenaza global".

Cs, en cambio, respaldó unos bombardeos "avalados por la OTAN" porque "no se puede seguir permitiendo que se produzca un genocidio con armas químicas sobre la población civil". Para Cs, el objetivo "final de este asunto" es llevar a Asad "ante la justicia".