La Asamblea Nacional Constituyente (ANC), el órgano plenipotenciario controlado exclusivamente por chavistas afines al Gobierno de Nicolás Maduro, retiró ayer las competencias administrativas de la Asamblea Nacional, el Parlamento del país en manos de la oposición. De esta forma, la Constituyente asumió por decreto las potestades legislativas que le correspondían al anterior parlamento, una cámara que ya de antemano no podía llevar a cabo ninguna iniciativa, al haber sido declarada en desacato por el Tribunal Supremo del país.

Mientras que la presidenta de la ANC, Delcy Rodríguez, aseguró que pese a despojarle de sus competencias no se está disolviendo el parlamento opositor, la oposición rechazó la "disolución" de esta Cámara y anunció la convocatoria de una sesión parlamentaria para hoy. Asimismo, acusó al régimen de Maduro de perpetrar un "golpe de Estado" a través de la "fraudulenta e ilegal" ANC.