La primera ministra británica, Theresa May, estaría dispuesta a ofrecer a la Unión Europea (UE) dos años de libre circulación y acceso al territorio británico para los ciudadanos comunitarios tras la salida del país de la UE, según informó ayer el diario londinense "The Times".

El plan, elaborado por el ministro de Economía británico, Philip Hammond, habría logrado obtener el apoyo de todos los miembros del Gobierno después de superar las reticencias de algunos ministros conservadores.

La propuesta se conoce un día después de que Bruselas y Londres concluyeran la segunda ronda de negociaciones por el "Brexit" sin alcanzar un acuerdo sobre la situación de los ciudadanos europeos residentes en el Reino Unido.

Bruselas, por su parte, quiere restringir el libre movimiento de los británicos que viven en el continente, quienes perderían el derecho automático de vivir y trabajar en otro Estado miembro de la UE.