El presidente estadounidense, Donald Trump, "jamás sugirió o dirigió" al exdirector del FBI James Comey para dejar de investigar a nadie en la pesquisa sobre la supuesta injerencia rusa en los comicios de 2016 y los posibles nexos de su campaña con el Kremlin, aseguró hoy su abogado Marc Kasowitz.

En una declaración leída ante la prensa, Kasowitz negó que Trump pidiera, como testificó Comey en el Senado sobre sus conversaciones con el presidente, que "dejara pasar" la investigación a su exasesor de Seguridad Nacional Michael Flynn, quien dimitió en febrero tras mantener contactos con representantes del Kremlin.

En el comunicado, filtrado primero a los medios antes de comparecer en la Cámara, Kasowitz negó también que pidiera a Comey lealtad "ni en forma ni en sustancia".

Kazowitz, que acaba de ser contratado por el presidente para su equipo legal, matizó que "la Oficina del Presidente tiene el derecho de esperar lealtad de aquellos que sirven a la Administración", en una comparecencia en el Club Nacional de la Prensa de Washington tras la que no aceptó preguntas de los periodistas.

El abogado consideró que sería apropiado determinar si Comey debe ser investigado por haber filtrado las notas tomadas para registrar el contenido de sus conversaciones con Trump, que calificó de "subrepticias, unilaterales y desautorizadas".

Comey admitió hoy que filtró el contenido de algunas de sus conversaciones con Trump, hasta su despido el 9 de mayo, a un amigo, para que este las distribuyera en la prensa y aumentara la presión para nombrar a un fiscal independiente sobre la supuesta injerencia rusa en las elecciones de 2016, lo que ocurrió días después.

El abogado de Trump considera que el testimonio de hoy de Comey prueba que el presidente no es parte de la investigación sobre la posible colusión con Rusia de su campaña y que "ni un solo voto cambió" como resultado de la presunta intromisión rusa.