El ministro israelí de Defensa, Avigdor Liberman, rechazó ayer el diálogo con Irán pero se mostró esperanzado ante la posibilidad de cooperar con Arabia Saudí en el ámbito regional dentro de una "coalición de los moderados" contra los "radicales" de Teherán.

Liberman realizó las declaraciones al intervenir en la tercera y última jornada de la Conferencia de Seguridad de Múnich, dedicada a los múltiples conflictos de Oriente Medio.

Antes, el ministro iraní de Exteriores, Mohamad Yavad Zarif, había abogado por abordar con todos los países del Golfo Pérsico los conflictos en Siria e Irak, pero de forma inclusiva y dejando de lado las posturas maximalistas.

"Irak, Siria y Bahrein necesitan un proceso político" para alcanzar una solución estable, ya que la vía militar no va a traerla, advirtió.

No obstante, el ministro de Exteriores saudí, Adel al Yubeir, afirmó que Irán "es parte del problema y no de la solución" en Oriente Medio, y rechazó dialogar con Teherán sin un cambio fundamental por su parte. A su juicio, será "muy difícil" hablar con Teherán si no cambia los "principios" sobre los que basa su régimen.