El Gobierno de Nicolás Maduro autorizó este lunes por la noche la liberación de cinco presos políticos, en lo que constituye su primer gesto hacia la oposición desde que un día antes comenzara el diálogo auspiciado por el Vaticano y Unasur para intentar resolver la crisis venezolana.

El secretario ejecutivo de la plataforma opositora Mesa de Unidad Democrática (MUD), Jesús Torrealba, consideró las liberaciones "un gesto importante", pero "no suficiente". Las excarcelaciones "deben continuar", reclamó el líder opositor, porque hay cerca de un centenar de "presos políticos".

En concreto, dio los nombres de Leopoldo López, Antonio Ledezma y Manuel Rosales. Voluntad Popular (VP), el partido de López, es el único de los cuatro principales de la MUD que no envió representantes el domingo a la primera reunión entre el chavismo y la oposición, entre otras razones porque el diálogo comenzaba sin que los presos políticos hubiesen sido excarcelados.

Sin embargo, el gesto de Maduro puede tener consecuencias positivas. La MUD sopesa suspender la marcha al Palacio de Miraflores -sede del Gobierno- convocada para mañana, y aplazar la comparecencia de Maduro ante la Asamblea Nacional, prevista, en principio, para ayer, según reveló este martes una fuente al diario local "El Nacional".

El rotativo, próximo a la MUD, informó de que diputados de Primero Justicia (PJ), Acción Democrática (AD) y Un Tiempo Nuevo (UTN), los otros tres grandes partidos de la MUD, estarían negociando la posibilidad de posponer la sesión parlamentaria en la que el Legislativo abordará la responsabilidad política de Maduro en la crisis venezolana.

Estos movimientos se enmarcan en el diálogo que el Gobierno y la MUD iniciaron el pasado 30 de octubre en Isla Margarita con la mediación del Vaticano y Unasur, y en el que actúan como valedores tres expresidentes: el español José Luis Rodríguez Zapatero, el dominicano Leonel Fernández y el panameño Martín Torrijos. En su reunión del domingo, las partes acordaron instalar cuatro mesas de diálogo (paz y Estado de Derecho, reparación a las víctimas, cronograma electoral y economía). El próximo encuentro será el 11 de noviembre en la capital venezolana.

El arzobispo de Caracas, el cardenal Jorge Urosa Savino, pidió a la MUD que suspenda la marcha convocada para mañana. Savino dijo que "no vale la pena" correr el riesgo de que haya un enfrentamiento directo entre seguidores de la oposición y del chavismo, ya que estos últimos también han sido convocados.