El FBI anunció ayer que investigará una nueva serie de correos electrónicos enviados por la candidata del Partido Demócrata a la Casa Blanca, Hillary Clinton, durante su etapa al frente del Departamento de Estado, a pesar de que el pasado septiembre rechazó presentar cargos contra ella.

Dos meses antes, Clinton había sido sometida a un largo interrogatorio en el cuartel general del FBI sobre este asunto, pero días después el Departamento de Justicia anunció que no presentaría cargos contra la ex primera dama, siguiendo el criterio de la Policía federal.

No obstante, Comey no se privó de acusar a la candidata de actuar de manera "extremadamente descuidada" con el manejo de la información al frente de la diplomacia estadounidense.

Las nuevas pesquisas fueron confirmadas por el FBI en una carta remitida a los presidentes de varios comités del Congreso. "El FBI debe investigar y revisar adecuadamente estos e-mails y determinar si contienen información clasificada, así como evaluar su importancia en nuestra investigación", dice Comey en la misiva, en la que agrega que "el FBI no puede determinar aún si el material es significativo" para la investigación, ni cuánto tiempo llevará saberlo.

No obstante, fuentes citadas por la CBS aclararon que no se trata de una reapertura de las pesquisas, puesto que éstas nunca llegaron a cerrarse del todo.

"The New York Times" informó de que lo investigado son mensajes de texto enviados a una adolescente en Carolina del Norte por Anthony Weiner, esposo de una importante ayudante de Clinton en la campaña electoral, Huma Abedin. Una fuente federal advirtió de que podría haber miles de correos nuevos.

El portavoz del Departamento de Estado, Mark Toner, mostró la voluntad del Gobierno de "colaborar" si así lo solicita el FBI, aunque matizó que "no tiene detalles ni más información" que la que figura en la carta de Comey.

El anuncio del FBI llega después de que Wikileaks filtrara numerosos correos electrónicos atribuidos a Clinton y a su equipo de campaña, si bien fuentes citadas por la cadena NBC descartaron que los documentos en cuestión sean los que han visto la luz estos últimos días. También descartan que se trate de material derivado de un ciberataque ruso.

La polémica en torno al uso de los distintos servidores ha sido uno de los temas recurrentes a lo largo de toda la campaña, así como en los debates televisados con el candidato republicano, Donald Trump. A diez días de las presidenciales, el asunto ha vuelto a copar titulares.

De hecho, Trump aprovechó su primer acto tras el anuncio del FBI para criticar la "corrupción" de Clinton y su conducta a lo largo de los últimos años, que "amenaza la seguridad" de EE UU. En septiembre, el magnate no dudó en considerar delictiva la decisión del FBI y el Departamento de Justicia de no presentar cargos contra la exsecretaria de Estado, pero ayer admitió que el sistema "podría no estar tan amañado como pensaba".

La Bolsa de Nueva York sufrió una brusca caída.