Estados Unidos ha matado al número dos y "ministro de finanzas" del grupo yihadista Estado Islámico (EI), Abd al Rahman Mustafa al Qaduli, y baraja el envío de más militares a Irak para asistir a los efectivos de ese país en su lucha contra los terroristas.

"Estamos eliminando sistemáticamente al gabinete del Estado Islámico. De hecho, las Fuerzas Armadas estadounidenses han matado a varios terroristas clave del EI esta semana, incluyendo, creemos, a Haji Imam", anunció ayer el secretario de Defensa de EE UU, Ash Carter, en rueda de prensa.

Carter se refirió a Al Qaduli por uno de sus apodos y lo describió como un terrorista "bien conocido" que servía de "ministro de finanzas y era responsable de algunos asuntos externos y tramas (terroristas)", también fuera de Siria e Irak.

"Hemos eliminado al líder que supervisa la financiación de las operaciones del Estado Islámico, lo que daña su capacidad para pagar a los combatientes y para reclutar", subrayó. Según el responsable de Defensa, "la eliminación de este líder del EI dificultará la capacidad de la organización para llevar a cabo operaciones tanto dentro como fuera de Irak y Siria".

El jefe del Estado Mayor Conjunto de EE UU, general Joseph F. Dunford, dijo que tanto él como Carter consideran que debe enviarse más militares para entrenar y asistir a los soldados y policías iraquíes en su lucha contra los terroristas.

"El secretario y yo creemos que habrá un incremento en las fuerzas estadounidenses en Irak en semanas, pero esa decisión aún no se ha tomado", explicó el general en la misma rueda de prensa.

Estados Unidos cuenta con 3.870 militares en Irak, un contingente que ha entrenado a 17.500 soldados iraquíes y a 2.000 policías, según las últimas cifras oficiales.

El general coincidió con Carter en que el "impulso" de la campaña en las últimas semanas va a favor de la coalición internacional contra el EI, pero advirtió de que la lucha está lejos de concluir.

"De ninguna manera diría que estamos a punto de partir la columna vertebral del EI o que la lucha se ha terminado", señaló Dunford.

Preguntado por el impacto de la supuesta muerte de Al Qaludi, Carter admitió que "los líderes pueden ser reemplazados", al tiempo que subrayó la necesidad de continuar minando la dirección del grupo yihadista.