La carrera electoral para elegir a los candidatos demócrata y republicano a la Casa Blanca vivió ayer un nuevo episodio con la celebración de los caucus demócratas en Nevada y las primarias republicanas en Carolina del Sur, dos estados en los que las minorías étnicas están llamadas jugarán un papel destacado.

Tras las asambleas populares de Iowa y New Hampshire, la caravana demócrata se desplaza al Oeste por primera vez y llega a Nevada, donde más del 25% de la población es latina, mientras que la comitiva republicana se detiene en Carolina del Sur, estado en el que residen más de 1,3 millones de negros de un total de 4,6 millones de habitantes.

En el bando demócrata, los dos aspirantes a la nominación aterrizaron en Nevada después de que Hillary Clinton ganara por la mínima en Iowa y Bernie Sanders se impusiese cómodamente en New Hampshire. Las encuestas daban a a Clinton como clara favorita en Nevada, pero su diferencia sobre Sanders se redujo el miércoles a un solo punto en un sondeo de CNN/ORC.

El viento parece soplar ahora a favor del veterano senador de Vermont, dado que el jueves se dio a conocer otro sondeo, esta vez de la cadena Fox News, en el que por primera vez una encuesta a escala nacional da la victoria a Sanders, con el 47% de los votos, frente a un 44% de Clinton.

En un encuentro televisivo celebrado ese mismo día, Clinton y Sanders dedicaron gran parte de su tiempo a detallar sus propuestas de inmigración, un tema especialmente sensible para los intereses latinos.

"Como presidente, haré todo lo posible para hacer una reforma migratoria integral", prometió Sanders. Por su parte, Clinton se comprometió, si resulta elegida presidenta, a sacar adelante una reforma migratoria durante los 100 primeros días de mandato.

En el otro bando, la carrera republicana, mucho más concurrida y con seis candidatos todavía en liza, llegó a Carolina del Sur con el polémico Donald Trump en cabeza a escala nacional, con el 3 % de la intención de voto, según una encuesta de la Universidad de Quinnipiac (Connecticut) publicada esta semana.

En segundo lugar, a mucha distancia, aparece el senador de origen cubano por Florida, Marco Rubio (19%), seguido del también senador de ascendencia cubana por Texas Ted Cruz (18%). Trump ganó en las asambleas populares republicanas en New Hampshire, pero quedó segundo en Iowa, estado en el que se alzó con la victoria Cruz.

Marco Rubio llega a los caucus de Carolina del Sur con el relevante apoyo de la gobernadora de este estado sureño y notablemente conservador, la republicana de origen indio Nikki Haley, y el exgobernador de Florida Jeb Bush, cuya candidatura no termina de carburar, recurrió a su hermano, el expresidente George W. Bush, para darse un empujón.

Mientras, Trump, siempre polémico, pidió un boicot a Apple hasta que el gigante informático cumpla la orden del FBI de desbloquear el teléfono de uno de los terroristas de San Bernardino.