La canciller alemana, Angela Merkel, concedió ayer que hay que plantearse la posibilidad de hacer más estrictas algunas leyes ante lo ocurrido en Nochevieja en Colonia, donde muchas mujeres fueron acosadas sexualmente por centenares de hombres, probablemente de origen árabe y norafricano.

"Hay que pensar qué se puede hacer mejor", indicó Merkel durante un acto de su partido, la Unión Cristianodemócrata (CDU) en Maguncia (suroeste).

Entre otros puntos, Merkel señaló que hay que pensar en qué momento alguien pierde su "derecho de invitado" al país, en referencia a la participación de peticionarios de asilo en los sucesos de Colonia.

La cúpula de la CDU ha propuesto que los refugiados que cometan delitos por los que tengan que ir a la cárcel pierdan automáticamente ese estatus. La búsqueda de fórmulas en esa dirección será uno de los temas de la reunión de la cúpula de la CDU este fin de semana en Maguncia.

Del mismo modo, el vicecanciller alemán, Sigmar Gabriel, líder del socialdemócrata SPD, abogó por endurecer la ley para los refugiados que comentan delitos en Alemania. "Si es necesario cambiar las leyes, lo haremos. (...) Los delincuentes extranjeros no tienen nada que hacer en Alemania", indicó el también ministro de Economía.