La lista negra de 89 políticos europeos que tienen prohibida su entrada en el territorio de Rusia, según admitió Moscú el pasado sábado, ha agrandado la brecha que separa al Kremlin de Bruselas desde el estallido de la crisis de Ucrania.

Rusia admitió ayer que la lista, en la que figuran un eurodiputado y un exeurodiputado españoles, es una respuesta a las sanciones impuestas por la UE a Moscú a raíz del conflicto de Ucrania y la ocupación de Crimea. "La respuesta es simple. Esto fue hecho como respuesta a la campaña de sanciones lanzada contra Rusia por parte de varios Estados de la UE encabezados por Alemania", informó una fuente diplomática que se negó a confirmar qué nombres figuran en un listado en el que, según ha trascendido, figuran el ex primer ministro belga Guy Verhofstadt y el ex viceprimer ministro británico, Nick Clegg.