Las últimas armas químicas declaradas por el Gobierno sirio salieron ayer de su territorio, en el marco del acuerdo para destruir su arsenal, informaron las autoridades sirias y la misión internacional encargada de supervisar esta operación. La televisión, que citó una fuente del Ministerio de Exteriores, aseguró que el último cargamento abandonó ayer el país.

La fuente destacó que este logro demuestra el compromiso de Siria pese "a las difíciles condiciones de seguridad y los desafíos que presentan los ataques terroristas contra la nación siria y su pueblo".

La fuente manifestó su esperanza de que este "éxito" de Siria y de la misión conjunta de la ONU y la Organización para la Prohibición de Armas Químicas (OPAQ) abra la puerta para pedir a la comunidad internacional que exija a Israel que se una a los tratados contra la proliferación de armamento de destrucción masiva.

En un comunicado, la directora de la misión de la ONU y la OPAQ, Sigrid Kaag, confirmó la salida para su posterior destrucción de la última tanda de armas químicas de Siria, que suponía el 7,2 % del total declarado por las autoridades.