La casi seguridad de que se producirán ataques talibanes marcará hoy en Pakistán la jornada de elecciones legislativas, ante la que los sondeos auguran que la coalición liberal saliente dará paso a una mayoría de tinte conservador.

Los analistas centran su atención tanto en los resultados que arrojen las urnas como en las amenazas vertidas por los talibanes contra candidatos y votantes de unos comicios que suponen un eslabón mas en el proceso de democratización del país, una de las cuatro potencias nucleares asiáticas (junto a China, India e Israel).

"Esperemos que sean unas elecciones limpias y con buena participación, pero esperemos sobre todo que no haya grandes problemas de seguridad, porque eso sería una muy mala señal", dijo un diplomático europeo.

La violencia insurgente se cobró en campaña cerca de un centenar de muertes en incidentes por todo el país, especialmente en la provincia noroccidental de Khyber Pakhtunkhwa y en la urbe meridional de Karachi.

Mientras en Afganistán, donde los talibanes tienen una presencia aún más relevante que en Pakistán, la canciller Angela Merkel inició ayer una visita sorpresa a los soldados alemanes allí destacados, una semana después de que muriese en combate el primer miembro de las fuerzas especiales germanas.