La eléctrica francesa EDF informó este jueves de que ha detectado una fuga de agua radiactiva en la central nuclear de Penly, en la costa de Normandía, la misma en la que se había registrado un incendio horas antes, pero precisó que está controlada en los depósitos previstos para ese tipo de situaciones.

La operadora indicó en un comunicado que la situación "no presenta ningún riesgo sobre el medio ambiente" y explicó que se ha producido como consecuencia de las llamas de esta tarde desde uno de los cuatro conductos de refrigeración del circuito primario del reactor número dos.

"El reactor, que se paró automáticamente, sigue siendo enfriado con normalidad y los equipos de la central trabajan para bajar la presión y la temperatura del agua contenida en el circuito", apuntó la compañía, que añadió que en cuanto ambas desciendan se podrá iniciar la evaluación del conducto y su reparación.

De acuerdo con los procedimientos habituales, según su nota, tanto la Autoridad de Seguridad Nuclear, como la prefectura regional y la subprefectura de Dieppe, la ciudad más próxima a Penly, fueron advertidos inmediatamente del incidente.

La empresa había explicado hoy que el humo que se produjo en un local del reactor número dos activó una alarma a las 12.20 locales (10.20 GMT), tras la cual una decena de vehículos de bomberos acudieron a las instalaciones y controlaron el fuego.

EDF explota todas las centrales atómicas en producción en Francia, que generan cerca del 80% de la electricidad del país, y en su nota aclaró que esas instalaciones son seguras y que no había habido heridos.