La defensa del fundador de WikiLeaks, Julian Assange, cuestionó hoy ante el Tribunal Supremo británico la autoridad de la Fiscalía sueca para pedir la extradición del informático pues, según dijo, "no tiene independencia ni imparcialidad".

El Tribunal Supremo, máxima instancia judicial del Reino Unido, empezó a atender hoy el recurso presentado por Assange contra su extradición a Suecia, que le reclama por tres delitos de agresión sexual y uno de violación a dos mujeres suecas en agosto de 2010.

En la vista judicial de hoy -que durará dos días, aunque el dictamen se conocerá en una fecha posterior aún por fijar-, la abogada de Assange, Dinah Rose, afirmó que el proceso de extradición plantea un importante interrogante legal en relación con la Fiscalía sueca, que emitió la orden de extradición.

Según Rose, para cumplir con principios legales fundamentales, la firma de euroórdenes debe corresponder a los jueces, que son autoridades independientes e imparciales, condiciones que no reúne la Fiscalía.

"El Parlamento considera que las órdenes europeas de arresto deben ser emitidas por tribunales o jueces y considera que las órdenes emitidas por otros organismos no pueden ser ejecutadas", argumentó la defensa del informático australiano.

Además, Rose señaló que la orden de arresto emitida suponía una "interferencia con la libertad individual".

Assange, que acudió hoy al tribunal, niega los cargos que se le imputan y por los que fue detenido el 7 de diciembre de 2010.

Si el Supremo falla a favor de Julian Assange, tendría serias consecuencias para el sistema europeo de extradición.

Si, por contra, Assange pierde el recurso, será extraditado a Suecia en el plazo de diez días, aunque podrá recurrir de nuevo ante el Tribunal de derechos humanos de Estrasburgo.

A las puertas del Tribunal Supremo se congregó hoy un grupo de partidarios del fundador de WikiLeaks, que mostraron pancartas en su defensa y en la del soldado Bradley Manning, procesado en EEUU por haber filtrado al portal información confidencial de ese país.

Assange, bajo arresto domiciliario en Inglaterra desde su detención, recurrió al Supremo después de que en noviembre el Tribunal Superior aprobara su entrega a Suecia, confirmando así la decisión tomada en febrero de 2010 por una corte inferior.

El informático, de 40 años, fue arrestado en Londres días después de que cinco periódicos de todo el mundo, entre ellos el británico "The Guardian" y el español "El País", publicaran junto con WikiLeaks miles de cables diplomáticos estadounidenses que avergonzaron a Gobiernos de todo el mundo.

Los partidarios del experto informático creen que su entrega a Suecia podría desembocar en una eventual extradición a EEUU, país que ha abierto una investigación a puerta cerrada para decidir si puede imputarle.

El fundador de WikiLeaks siempre ha mantenido su inocencia y al principio de su proceso judicial en el Reino Unido denunció una persecución orquestada por EEUU por haber revelado miles de cables diplomáticos secretos de ese país a través del portal.