Ni siquiera sus doce años al frente de Francia (1995-2007) han salvado al ex presidente Jacques Chirac, de 76 años, de tener que acabar rindiendo cuentas ante la justicia por asuntos de corrupción correspondientes a sus años como alcalde de París (1977-1995).

En un hecho sin precedentes en los cincuenta años de historia de la V República, una jueza, Xavière Simeoni, llamó ayer a Chirac a comparecer ante él por presunta malversación de fondos públicos y abuso de confianza. El ex presidente gozó de inmunidad durante doce años pero en 2007 el sumario, que empezó a ser investigado en los años 90, fue reabierto.

Se trata del caso de los llamados "empleos ficticios" del consistorio de la capital francesa, a través de los cuales se financió ilegalmente al RPR, el partido neogaullista fundado y encabezado por Chirac, que es el antecedente del actual partido gubernamental, la UMP.

La magistrada, que se dispone a abandonar sus funciones y cuyo cargo de juez de instrucción desaparecerá con la reforma judicial en curso en Francia, desestimó la opinión de la Fiscalía, que había concluido el pasado 29 de septiembre que el caso debía ser sobreseído.

Ahora, el fiscal de la República, Jean-Claude Marin, podría apelar la decisión, pero es algo que parece poco probable, por lo que Chirac tendrá que sentarse en el banquillo.

La magistrada considera que 21 empleos de los 481 examinados con lupa por la justicia, presentan un carácter ficticio, pero desestimó imputar a Chirac "falsedad en escrituras públicas", o sea, estafa, lo que le habría llevado ante el Tribunal de Casación.

Tras difundirse la decisión judicial, el ex presidente reaccionó con rapidez, asegurando a través de un comunicado que toma "acta de esta decisión". El texto asegura que Chirac "está sereno y decidido a establecer ante el tribunal que ninguno de los empleos que se siguen debatiendo es un empleo ficticio".

Asimismo, el comunicado pone de manifiesto que a Chirac se le acusa sólo de "21 supuestos empleos ficticios, cuando han sido 481 los examinados por la justicia, lo que excluye cualquier idea de fraude sistemático durante el periodo en el que fue alcalde de París".

Además de Chirac, al menos nueve personas tendrán que pasar por el tribunal, entre ellos Jean de Gaulle, nieto del general De Gaulle, fundador de la V República; un hermano de Jean-Louis Debré, actual presidente del Consejo Constitucional, y la esposa del ex ministro de Exteriores Hervé de Charette.