El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, exhorta a mirar hacia el futuro para poder reactivar el proceso de paz en Oriente Medio y no detenerse en cada detalle de este conflicto que "ha causado tanto dolor". "Si queremos reactivar las negociaciones para traer la paz a la región no nos podemos detener en cada hecho", dijo en una entrevista al popular diario israelí "Maariv".

Rodríguez Zapatero respondía con esas palabras a una pregunta del diario sobre si considera que israelíes y palestinos cometieron crímenes de guerra, según las conclusiones del Informe Goldstone sobre la guerra en la franja de Gaza.

Ese informe acusa al Ejército israelí y el movimiento islamista Hamás de cometer crímenes de guerra en la contienda que libraron el pasado invierno. "Sé que es un tema muy sensible en Israel y tenemos que tratarlo con mucho cuidado", dijo sobre dicho informe, aunque precisó que no es su papel juzgar si las partes han cometido esos crímenes.

"Si queremos promover la paz entre israelíes y palestinos, tenemos que pensar en aquellos que están con vida, aquellos que han quedado con vida y en aquellos que seguirán con vida en los próximos años", insistió, no obstante, Zapatero.

El presidente del Gobierno señala que hay que tener en cuenta el informe, pero "la respuesta tiene que ser sopesada, equilibrada y por supuesto no puede convertirse en un obstáculo a las negociaciones".

En la entrevista, realizada en La Moncloa y que será publicada íntegramente este viernes, en el suplemento del fin de semana, Rodríguez Zapatero asegura que "España es amiga de Israel" y que "cuando la criticamos lo hacemos como amigos".

El diario destaca la determinación de España de cambiar la legislación sobre jurisdicción universal que hace unos meses enturbió las relaciones bilaterales debido al expediente abierto por un juez español sobre la muerte del líder del brazo armado de Hamás, Salah Shehade, y catorce civiles, en un ataque aéreo israelí en Gaza en 2002.

En el extracto de la entrevista el diario se hace eco de las afirmaciones del propio Zapatero sobre que su familia tenía origen judío, al parecer, converso.

El presidente afirma que en España no existe antisemitismo y prueba de ello, es que "no hay ataques de este tipo en la actualidad". "Antisemitismo era la dictadura de Franco", dice el jefe del Gobierno, al pedir que "no se eleven a la categoría de ataques antisemitas cualquier comentario, publicación o foto".