Bachir fue recibido por el primer ministro de Etiopía, Meles Zenawi, en el aeropuerto Internacional de Bole, en Addis Abeba.

Zenawi ya había señalado que no acepta la orden de detención contra el gobernante sudanés dictada el pasado 4 de marzo por la CPI por crímenes contra la Humanidad.

Rodeados de fuertes medidas de seguridad, Bachir y Zebnawi, que gobiernan los dos países más extensos de África, se dirigieron a un hotel de la capital etíope, donde se desarrolla la reunión de la Comisión Bilateral, que debía haberse celebrado el pasado 10 de marzo y que fue aplazada.

Según dijeron a Efe fuentes del Gobierno etíope, Bachir también tiene previsto reunirse con responsables de la UA, que tiene su sede en Addis Abeba, además de tratar cuestiones de seguridad y agricultura en la Comisión Bilateral.

Desde el pasado mes de marzo, Al Bachir ha visitado Eritrea, Egipto, Libia y Arabia Saudí, y ha atendido a una cumbre de la Liga Árabe en Qatar, sin que ninguno de estos países haya procedido a su detención, como ha pedido la CPI.

Tanto la Liga Árabe como la UA han expresado su rechazo a la orden de detención contra Bachir y pedido al Consejo de Seguridad de la ONU que utilice sus prerrogativas para aplazarla.

Zenawi afirmó hace una semana que no aceptaría la orden de detención de la CPI y que daría "la bienvenida a Bachir cuando llegue a Etiopía".

Bachir está acusado de crímenes de guerra y de lesa humanidad por delitos supuestamente cometidos durante la guerra de Darfur, en el oeste de Sudán, que estalló en febrero del 2003 y que ya ha causado unos 300.000 muertos.