El primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, anunció ayer durante la inauguración de una escuela para los niños afectados por el terremoto de Los Abruzos un referéndum para la modificación de la ley electoral el próximo 21 de junio.

El líder italiano dijo que descartó el 7 de junio, lo que haría coincidir el referéndum con las elecciones europeas, porque de lo contrario su socio en el Ejecutivo, la Liga Norte, habría hecho “caer el Gobierno”.

El referéndum consultará a la población italiana si desea una modificación de la ley electoral que premiaría a la lista más votada, con lo que se reduciría la atomización tradicional en las cámaras italianas y facilitaría la transición al bipartidismo

Berlusconi sugirió que el referéndum no coincidirá con las europeas por presiones de la Liga Norte, que se vería perjudicada, por lo que la consulta se celebrará el 21 de junio, coincidiendo con la segunda vuelta de las elecciones municipales.

El baile de fechas provocó una polémica en Italia, después de que la presidenta de la patronal italiana Confindustria, Emma Marcegaglia, haya criticado la elección del 21 de junio como fecha para el referéndum.

A su juicio, el hecho de que la consulta no coincida con las elecciones europeas implica un gasto de 400 millones de euros, algo que, a su juicio, no es aceptable, después de que el Gobierno haya mencionado la posibilidad de gravar a las rentas más altas con un nuevo impuesto para sufragar la reconstrucción de la región de Los Abruzos, devastada por un fuerte terremoto el 6 de abril que originó la muerte de 295 personas.