Las fuentes afirmaron anteriormente que el ataque había causado un muerto y cinco heridos, aunque no descartaron que la cifra de víctimas, todos civiles, pudiera aumentar.
El coche-bomba estaba aparcado en la calle comercial Al Nuab, en la zona de Al Kadimiya, de mayoría chií y que acoge varios santuarios de esta comunidad musulmana.
La explosión causó, además, importantes daños en varios edificios y tiendas en la zona.
Este ataque se produce un día después de que una cadena de atentados con coches-bomba sacudiera la capital y dejara más de un centenar de heridos.
En total seis vehículos cargados de explosivos estallaron en barrios suníes y chiíes de Bagdad y sus afueras. Casi todos ellos se produjeron en un período de dos horas, a partir de las 07.30 hora local (04.30 GMT).