Los pilotos de PGA, controlada por la principal aerolínea portuguesa TAP, comenzaron hoy un paro de 24 horas que acaba esta medianoche para pedir nuevas normas laborales, que incluyan tiempos de reposo y turnos máximos de trabajo para reducir los riesgos asociados a la fatiga.

Portavoces de la aerolínea señalaron que todos los pasajeros que no puedan ser transportados hoy en aeronaves de la PGA -se estima que unos 3.000 tenían reservas en esa compañía-, serán enviados a sus destinos en aviones fletados a otras empresas, principalmente de la TAP.

Asimismo, el Sindicato de los Pilotos de Aviación Civil (SPAC) luso, organizadora del paro, ha anunciado que los aviadores de PGA convocarán cuatro días más de huelga, para los próximos 14, 15, 18 y 19 de abril.

PGA, con 16 aparatos, emplea a 725 personas -150 de ellos pilotos- y cuenta con 23 destinos en su oferta, entres los que destacan las ciudades españolas de Valladolid, Valencia, Pamplona, Madrid, A Coruña, Barcelona y Málaga.

La aerolínea fue comparada en 2007 por TAP que, con una plantilla de unos 5.600 empleados y una flota de 47 aviones, vuela a 27 países de Africa, Europa y América y es la transportadora europea líder en operaciones con Brasil.