Bélgica sigue, por tanto, después de tres días de negociaciones, a la espera de una propuesta definitiva y de un nombre concreto para el cargo de primer ministro.

Los analistas políticos indican que el hecho de que "no se haya visto movimiento" a las puertas de la residencia real, no significa que no haya habido contactos telefónicos, pero igualmente dicen no estar seguros de cómo interpretar la ausencia de visitas.

Estaba previsto que el Rey recibiese esta tarde a los viceprimeros ministros del Gobierno y a la persona a la que propondría conducir el nuevo Ejecutivo.

Sin embargo, nadie ha acudido hasta ahora al palacio del Belvedere, aunque no se descarta una visita a última hora de la presidenta del Partido Democristiano Flamenco (CD&V), Marianne Thyssen.

De momento, es el actual presidente del Congreso, Herman Van Rompuy, el que parece contar con más apoyos para liderar el nuevo Ejecutivo.

En una entrevista para la televisión privada RTL, el ministro de Finanzas, Didier Reynders, afirmó que si el Partido Democristiano Flamenco (CD&V) -que lidera la coalición gubernamental- apoya a Van Rompuy "hay una mayoría que respaldaría la decisión".

Reynders se mostró dispuesto a asumir el mando si se lo pide el Rey, pero desconfió de esa posibilidad porque existe hostilidad hacia un primer ministro francófono.

No obstante, la agencia de noticias Belga asegura que si bien la continuación de Leterme la rechazan prácticamente todas las fuerzas políticas -a excepción de su propio partido (CD&V) y los liberales flamencos (VLD)-, aún no se dispone de un candidato claro.

El presidente del Senado, Armand De Decker (MR), comentó hoy que vería bien si el nuevo jefe del Gobierno fuese un liberal flamenco o francófono (en referencia a Guy Verhofstadt y Didier Reynders), pero el ex ministro de Defensa, André Flahaut, (PS) dijo "no ver a Reynders dirigiendo el Gobierno".

Otros candidatos son los ex primeros ministros Jean-Luc Dehaene (CVD) y la actual presidenta del CD&V, Marianne Thyssen.

Tampoco se sabe aún si el próximo Gobierno mantendrá la base actual o será una coalición creada desde cero, pero en vista de la necesidad de reaccionar rápido lo más probable es que se mantengan todos los ministros a excepción de Leterme y del titular de Justicia, Jo Vandeurzen.

El Rey deberá decidir asimismo si el nuevo primer ministro permanecerá en el poder hasta las elecciones regionales y europeas de junio o hasta el final de la legislatura, en 2011.

La opción de convocar elecciones anticipadas ha sido descartada por casi todos los partidos, menos por la oposición flamenca: los Verdes (Groen), el ultraderechista Vlaams Belgan (Interés Flamenco) y la N-VA (Nueva Alianza Flamenca).

Las distintas fuerzas políticas y la propia Casa Real han declarado su deseo de encontrar una solución lo antes posible, esta noche o a más tardar a principios de semana.