La mayoría de las víctimas mortales, 14, fallecieron en accidentes de tráfico provocados por las malas condiciones climatológicas, mientras que otras dos fueron arrastradas por las aguas, otra murió al derrumbarse el tejado de su casa y la última, en un incendio.

Los servicios argelinos de meteorología emitieron ayer un nuevo boletín especial con el anuncio de que las lluvias torrenciales continuarán en las próximas horas.

En octubre pasado, 87 personas murieron debido a las inclemencias del tiempo, 43 de ellas en la provincia de Gardaia, al sur del país.