En Roma se vivieron momentos de tensión cuando la Policía intentó impedir que unos mil estudiantes ocupasen las vías de una estación de metro y, en los enfrentamientos, sufrieron contusiones algunos agentes y un joven resultó herido en la cabeza por un golpe de porra.

En la capital italiana se organizaron hoy tres manifestaciones -convocadas por la Universidad "Roma Tre" y "la Sapienza" y los institutos- en las que, según los organizadores, participaron 25.000 estudiantes.

Al grito de "Nosotros la crisis no la pagamos", que se ha convertido en el eslogan de la protesta estudiantil, los jóvenes marcharon por el centro de Roma, lo que provocó importantes problemas de circulación.

Uno grupo de unos mil jóvenes se alejó del recorrido previsto y se dirigió a la estación de metro de Pirámide para intentar ocupar las vías y fue entonces cuando, de acuerdo con los estudiantes, tuvieron lugar las cargas policiales.

Fuentes de la Policía desmintieron que se hubiesen producido cargas y acusaron a los estudiantes de arrojarles botellas y objetos.

Tras algunos días de pausa, los estudiantes volvieron a tomar las calles de Italia para protestar contra la ley, aprobada el pasado 29 de octubre y que prevé algunos cambios en el sistema escolar.

Entre ellos, introduce la nota en conducta como requisito para aprobar el curso, así como el maestro único para niños de entre 6 y 11 años, excepto en inglés, informática y religión.

Paralelamente, se prevé recortar casi 100.000 puestos de trabajo entre profesores y personal no docente, al no cubrirse los del 80 por ciento de los trabajadores que se jubilarán.

Por su parte, los universitarios se oponen a las supresiones del personal docente de los centros de educación superior y al recorte de 1.500 millones de euros en los presupuestos para los próximos cinco años, lo que, aseguran, afectará a la investigación.

Al presentar un nuevo proyecto de ley para reformar la Universidad, la ministra italiana de Educación, Mariastella Gelmini, afirmó ayer que "los recortes ya anunciados van a permanecer", pero con esta norma "serán menos dolorosos".

La reforma prevé "la racionalización de los estudios, la eliminación de los cursos con un solo estudiante y la disminución de las sedes autónomas" para ahorrar en los gastos públicos universitarios.

El proyecto de ley de reforma universitaria no ha calmado los ánimos y, así, en Milán (norte de Italia) se concentraron hoy en la céntrica plaza del Duomo miles de personas, entre estudiantes, profesores y empleados del sector de la educación, para continuar las protestas de estos últimos días.

Las manifestaciones se repitieron en las principales ciudades del país como Turín, Pisa, Florencia, Nápoles y Cagliari, dentro de unas protestas que los estudiantes aseguran que no cesarán.