En sustitución, el presidente georgiano, Mijaíl Saakashvili, propuso al Parlamento la candidatura de Mgaloblishvli, diplomático de carrera, de 35 años, y ex embajador de este país caucásico en Turquía, Albania y Bosnia-Herzegovina.

La composición del nuevo Gobierno, en el que solo aparecen cuatro caras nuevas, fue aprobada con el respaldo de 98 diputados, y solo once legisladores de la oposición parlamentaria moderada votaron en contra, informó el servicio de prensa de la Cámara.

Así conservaron sus carteras los ministros del Interior, Vanó Merabishvili; Defensa, David Kezerashvili; Exteriores, Ekaterina Tkeshelashvili; Finanzas, Nika Guilauri, y Economía, Ekaterina Sharashideze.

También siguen en sus puestos los cuatro ministros de Estado para la Integración Europea, Guiorgui Baramidze; Reintegración, Temur Yakobashvili; para Asuntos de la Diáspora, Yulón Gagoshidze, y la Política Regional, David Tkeshelashvili.

Las nuevas caras en el Ejecutivo son los titulares de Justicia (cartera a la que se subordina la Fiscalía General), Zurab Adeishvili; para Asuntos de los Refugiados, Koba Subeliani; de Protección del Medioambiente y Recursos Naturales, Guiorgui Jachidze, y de Cultura y Deportes, Grigol Vashadze.

El único cargo de viceprimer ministro, que ocupan por turno varios ministros, y quedó a cargo del titular de Finanzas.

El anterior jefe del Gobierno, por su parte encabezará en el Ejecutivo un grupo de trabajo encargado de hacer frente a la crisis financiera y controlar la distribución y empleo de 4.550 millones de dólares reunidos para Georgia tras la guerra por países donantes.

La ausencia de cambios de profundidad en el Ejecutivo también fue criticada por representantes de la oposición extraparlamentaria, incluida la ex presidente del Parlamento y actual crítica de Saakashvili, Ninó Burdzhanadze.

En declaraciones a la prensa en Tiflis la política tachó la remodelación del Gabinete de "meramente cosmética" y dijo que tras el conflicto armado con Rusia al menos debía haber dimitido -o ser relevado en el cargo- el titular de Defensa.

Una vez aprobado el Gobierno, Mgaloblishvili presentó su programa, "Georgia unida y sin pobreza", llamado a hacer frente tanto al impacto de la crisis y los daños causados por la invasión rusa como a la secesión de hecho de las regiones separatistas de Abjasia y Osetia del Sur, cuya independencia ha reconocido Moscú.

"Afrontamos nuevos desafíos, que debemos contrarrestar con nuestro trabajo organizado, para plasmar el programa de 18 meses llamado a superar las consecuencias de la guerra, recuperar el ritmo de crecimiento anterior, garantizar empleo a la población y atender los problemas de los refugiados", dijo Mgaloblishvili.

Añadió que las tareas primordiales gel Gobierno serán impulsar el desarrollo económico, mejorar la situación social de la población, crear empleo, proteger la propiedad privada, democratizar el sistema judicial y combatir la corrupción, según la televisión.

El primer ministro pidió a los diputados un plazo de quince días para adaptar el proyecto del presupuesto presentado al Parlamento al programa del nuevo Gobierno, y propuso a la oposición iniciar negociaciones sobre su entrada en el gabinete de ministros.