Al menos 16 personas resultaron heridas ayer, una de ellas grave, en un nuevo ataque con excavadora perpetrado en una de las principales calles de Jerusalén. El conductor del "bulldozer", palestino y autor de un ataque que fue definido por la Policía israelí como "terrorista", tuvo que ser abatido a tiros por los agentes después de embestir a varios vehículos.

El ataque tuvo lugar cerca del hotel King David, donde iba a hospedarse el candidato demócrata a la presidencia de Estados Unidos, Barack Obama.

Obama llegó ayer por la noche a Jerusalén, procedente de Jordania, en el marco de la gira que realiza por la región. Obama llega con el reto de ganar la confianza de un país que es el principal aliado de Washington en Oriente Medio.

Pero horas antes de la llegada de Obama, el joven palestino Abu Tair, de 22 años, causó el pánico en Jerusalén cuando circuló con una excavadora por varias calles de la ciudad, embistiendo a coches y autobuses.

En el ataque, el conductor de la excavadora embistió a un autobús y al menos cinco turismos antes de ser tiroteado por las fuerzas de seguridad. En su trayecto el "bulldozer" dejó heridas al menos a 16 personas, una de ellas de gravedad.

Acción individual

Como en el anterior ataque con excavadora de hace tres semanas, ningún grupo armado ha reclamado la responsabilidad de la acción por lo que las autoridades israelíes se inclinan a pensar que se trata de otra acción individual. "El conductor de la excavadora dejó un lugar en construcción y embistió a dos coches", explicó un portavoz de la Policía.

"Un civil que vio lo que estaba ocurriendo le disparó. La excavadora siguió su camino. Una patrulla policial fronteriza continuó disparando y el terrorista fue abatido", añadió a continuación la fuente.