Los jefes de delegación de ambas Coreas, EEUU, Rusia, Japón y China analizaron en Pekín los principios específicos para la verificación y un mecanismo de inspección, así como la ayuda económica y energética que recibirá el régimen de Kim Jong-il a cambio, señaló el portavoz de la cancillería china Qin Gang.

"El diálogo a seis bandas logró cierto progreso acerca del mecanismo de verificación, alcanzando un principio de consenso", señaló Qin en declaraciones recogidas hoy por la agencia oficial de noticias Xinhua.

El portavoz avanzó que "pronto" se darán más detalles sobre dicho consenso.

Los seis negociadores están tratando de acercar las diferentes posiciones para emitir un documento al final de la actual ronda de negociaciones que dé por finalizada la segunda parte del desarme, que consiste en una declaración de las instalaciones norcoreanas a cambio de ser eliminado del "Eje del mal" estadounidense.

Washington anunció también, al recibir el inventario de las instalaciones de plutonio a finales de junio, que levantaría las sanciones económicas impuestas unilateralmente al régimen estalinista.

Las negociaciones se reanudaron el jueves pasado en Pekín para consensuar una verificación de dicho arsenal e iniciar la tercera parte del proceso, que incluye una declaración completa de las armas fabricadas y del supuesto programa secreto de uranio, así como su completo desmantelamiento.

A cambio, los cinco países interlocutores tendrán que completar la ayuda energética a Corea del Norte, de un millón de toneladas de petróleo pesado, y EEUU y Japón establecerán vínculos diplomáticos con el régimen.

Los seis negociadores están trabajando con "eficiencia" y en un "ambiente saludable", señaló el portavoz Qin.

La reunión, cuya fecha de finalización se desconoce por ahora pero que podría acabar hoy, proseguirá esta mañana con el objetivo de plasmar sobre el papel los pasos a seguir para la verificación del arsenal declarado.

Los grupos de trabajo de desnuclearización y ayuda económica y energética de los seis países mantienen una reunión paralela a la de los jefes de delegación.

El actual progreso se produce después de nueve meses de estancamiento debido al retraso de Pyongyang en presentar un inventario que satisficiera a Washington, un listado que superó la fecha límite de finales de 2007.

El inventario llegó a finales de junio, al mismo tiempo que Corea del Norte destruía la torre de enfriamiento de su principal reactor de plutonio, el de Yongbyon, donde se supone se sintetizó el material para el ensayo nuclear de 2006.

El diálogo a seis se inició en 2003, cuando Washington acusó a Pyongyang de estar desarrollando un programa de enriquecimiento de uranio que contravenía los acuerdos entre ambos países.