La declaración fue entregada ayer por las autoridades norcoreanas a China, con seis meses de retraso sobre el plazo previsto, y contiene, según Hill, detalles de los programas nucleares y de materiales para construir bombas.

El contenido del inventario nuclear no se ha divulgado de momento, aunque el propio Hill aseguró esta semana que no iba a contener detalles de las armas nucleares del régimen comunista, lo que se dejará para otra fase.

En declaraciones a los periodistas en Kioto, donde acompaña a la secretaria de Estado, Condoleezza Rice, a la cumbre de Exteriores del G8, Hill apuntó que las autoridades chinas le habían comunicado que el inventario estaría disponible para EEUU y el resto de los negociadores a partir de las 11.30 hora china (3.30 GMT).

En las negociaciones a seis bandas para la desnuclearización de Corea del Norte, auspiciadas por Pekín, participan las dos Coreas, China, Japón, Rusia y Estados Unidos.

Además, el experto estadounidense Christopher Hill dijo que su país trabajará para que Corea del Norte cumpla con su compromiso de desnuclearización y advirtió que "queda mucho trabajo por hacer".

El negociador nuclear de EEUU insistió en la posición estadounidense de que la desnuclearización norcoreana debe ir acompañada de una "verificación".

En cuanto a la preocupación japonesa sobre sus ciudadanos secuestrados por el régimen norcoreano en los años 70 y 80, Christopher Hill aseguró comprenderla.

"Estamos preocupados por la cuestión de los secuestros, el presidente (George W. Bush) ha dicho que no lo va a olvidar", apuntó en unas cortas declaraciones.

Está previsto que el régimen comunista de Corea del Norte destruya hoy una torre de refrigeración del centro nuclear de Yongbyon, un acto simbólico que será retransmitido en directo por varias televisiones, entre ellas la norteamericana CNN.

La demolición de la torre llega al día siguiente de que Pyongyang entregara a Pekín la declaración nuclear y que, de inmediato, EEUU anunciase que comenzaba el proceso para levantar las sanciones económicas contra Pyongyang y retirarlo de la lista negra de países que patrocinan el terrorismo.