El primer ministro irlandés, Brian Cowen, se comprometió hoy a presentar en la próxima cumbre de jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea, que se celebrará en octubre bajo presidencia francesa, posibles soluciones para salir del bloqueo provocado por el rechazo de su país en referéndum al Tratado de Lisboa, aunque eludió precisar si convocará una nueva consulta. Por su parte, el presidente de la Comisión, José Manuel Durao Barroso, aceptó "dar tiempo" a Irlanda para decidir sobre los siguientes pasos pero consideró "extremadamente difícil" que se pueda renegociar el Tratado.

Cowen se reunió en Bruselas con el presidente de la Comisión Europea para exponerle su análisis de los motivos del 'no' irlandés. También tenía previsto celebrar encuentros bilaterales con la canciller alemana, Angela Merkel; con el presidente de la Eurocámara, Hans-Gert Poettering; y con el primer ministro esloveno y presidente de turno de la UE, Janez Jansa. Y durante la cena dará explicaciones al resto de sus homólogos sobre el resultado del referéndum.

Al término de su encuentro con Cowen, Barroso explicó que ambos están de acuerdo en que el resultado irlandés "debe respetarse". Al mismo tiempo, coinciden en que los Estados miembros que todavía no han ratificado el Tratado de Lisboa, entre ellos España, tienen que seguir adelante con el proceso. Además, la Comisión apoya "que se dé tiempo a Irlanda para decidir cómo reaccionar y para presentar propuestas sobre los pasos a seguir".

"Ambos hemos acordado que la próxima reunión del Consejo Europeo en octubre será una ocasión apropiada para discutir de nuevo esta cuestión", aseguró Durao Barroso.

Por su parte, Cowen insistió en que "ahora es necesario dar tiempo a Irlanda para analizar el voto de la semana pasada y explorar opciones" y agregó que "es demasiado pronto para que nadie presente propuestas". "Acepto plenamente que tendremos que trabajar de manera intensa durante los próximos meses para identificar qué soluciones hay", indicó.

El Taoiseach no quiso responder cuando se le preguntó si en octubre anunciará la convocatoria de un nuevo referéndum y dijo que ahora va a iniciar un proceso de consultas tanto en su país como en el resto de la UE para identificar la mejor opción que permita al mismo tiempo "avanzar" y "garantizar que Irlanda pueda seguir jugando su papel aquí en la UE en la manera en que quieren los irlandeses".

El presidente de la Comisión fue preguntado por la posibilidad de que pueda renegociarse el Tratado de Lisboa para que Irlanda pueda mantener indefinidamente su comisario, ya que la pérdida de peso del país fue uno de los argumentos de la campaña del 'no'. Barroso contestó que ve "muy difícil, extremadamente difícil, lograr cualquier cambio institucional en el texto del Tratado de Lisboa".