El presidente francés, Nicolas Sarkozy, llamó hoy a continuar el proceso de ratificación del Tratado Europeo de Lisboa para que el "incidente" del rechazo irlandés a ese texto no se convierta en una "crisis".

También es preciso "cambiar nuestra forma de hacer Europa" con el fin de responder a las inquietudes de los ciudadanos, dijo Sarkozy, resuelto a impulsar ya iniciativas para "ser más eficaces al servicio de la vida cotidiana de los europeos", durante su presidencia semestral de la UE en el segundo semestre del año.

A preguntas en una rueda de prensa conjunta con el presidente de Estados Unidos, George W. Bush, en el Elíseo, Sarkozy afirmó que el "no" irlandés al tratado de Lisboa es "una realidad política".

La cuestión "no es saber si nos gusta o no. El pueblo irlandés se pronunció. Es una realidad. Hay que aceptarlo", sentenció Sarkozy.

En el referéndum irlandés del pasado jueves cuyos resultados se anunciaron el viernes, el "no" al tratado se impuso con el 53,4 por ciento de los votos.

Sarkozy dijo que él y la canciller alemana, Angela Merkel, opinan que debe continuar el proceso de ratificación del tratado, que ya ha sido ratificado por 18 de los 27 Estados de la UE, para que "este incidente irlandés no se convierta en una crisis". Señaló que ésta es también la intención del primer ministro británico, Gordon Brown.

Por tanto, el "primer elemento" es continuar con el proceso de ratificación, recalcó el presidente francés, antes de añadir que el segundo es la necesidad de "reflexionar todos juntos", ya que el "no" irlandés "no es una casualidad ni una sorpresa".

"Muchos europeos no entienden la forma en que se construye Europa. Tenemos que tenerlo en cuenta muy rápidamente" y "cambiar nuestra forma de hacer Europa", argumentó, al insistir en que "no hay derecho de sabotear" la "gran" idea que es la UE. Para Sarkozy, es preciso "actuar de forma diferente" dado que Europa, concebida para "proteger", "inquieta" a tantos europeos.

"Hay que tenerlo en cuenta. No dentro de seis meses sino ahora mismo", dijo el presidente, resuelto a que se tomen "iniciativas" como acordar una política europea de inmigración y dar "una respuesta europea a la escalada del precio del petróleo".

"Tenemos un deber de ser más eficaces al servicio de la vida cotidiana de los europeos", sentenció Sarkozy, que ve el "no" irlandés como "un llamamiento a hacer más y mejor, y a encontrar juntos las soluciones".